Las vacaciones son para ellos.
Llevo semanas desaparecida por aqui, pero no encuentro el momento de sentarme a escribir. En vacaciones mis días tienen más horas pero menos tiempo. Porque todo mi tiempo es para ellos.
En vacaciones, las mañanas son para despertarnos despacio, para remolonear en la cama y quedarme mirándoles mientras duermen.
Los días los transcurren en la playa, jugando con las olas, haciendo castillos y buscando cangrejos.
Las tardes saben a helado, tiovivo y camas elásticas. A largos paseos y a juegos en la arena. A ruedas de patata y alguna piruleta.
Por la noche nos dormimos leyendo cuentos o viendo las estrellas. Recuerdo cuando era pequeña cuando me gustaba salir a tumbarme en una hamaca y tapadita con una toalla contar las estrellas. Hoy es Catalina quien mi pide contarlas y yo feliz de acurrucarnos juntas hasta que el sueño puede con ella.
En vacaciones somos más que nunca un pack de tres. Estamos acostumbrados a estar sin papá, pero en vacaciones le echamos especialmente de menos. Por eso cuando aparece y nos regala unos días, los convierte en los más divertidos del año.
Ahora ya sabes por qué no paso por aquí, pero sigo activa en mi Instagram @milemae por si quieres seguir nuestro día a día.
Te mando un fuerte abrazo y espero que tú también disfrutes de tus vacaciones

Carga las pilas con el sol, con los juegos, con los niños, y disfruta de los días de verano